Según Jaime Sanabria, copresidente de EcoEléctrica, “el desarrollo sustentable es posible si sus cimientos se establecen sobre alianzas entre el gobierno, las empresas y las comunidades, en donde los proyectos de infraestructura privados estén en función de una integración económica, social y ambiental”.
Entre los criterios considerados por la Asociación de Industriales para este premio se destacó la implantación de iniciativas de conservación del medioambiente, su impacto social positivo, el establecimiento de programas que van más allá de lo que establecen las regulaciones y por sus inversiones en educación ambiental pública. El Premio de Excelencia Ambiental 2012, también establece que EcoEléctrica “representa un ejemplo a seguir por otras empresas”, promueve el apoyo a organizaciones de conservación ambiental, así como el desarrollo de alianzas para atender los asuntos ecológicos.
De acuerdo a Sanabria, el alto nivel de cumplimiento de la empresa y su compromiso ambiental “ha sido posible por la importancia que le hemos dado a la planificación y porque damos enorme prioridad a los estudios ambientales, la participación comunitaria y a la implantación de medidas de mitigación con un enfoque en la preservación y mejoramiento del medioambiente”.
Damaris Negrón, Gerente Ambiental de EcoEléctrica, destacó que el compromiso con la protección del ambiente y las comunidades permea a todos los niveles de la organización y señala al mismo como una pieza fundamental del éxito que ha tenido la empresa a través de sus 12 años de establecida.
Desde que inició la construcción de EcoEléctrica en 1996, se implementaron todas las medidas de mitigación disponibles para minimizar los impactos al ambiente y durante el inicio de sus operaciones en el 2000, la empresa ha desarrollado innumerables programas de protección y conservación.Previo a la etapa de construcción de sus instalaciones, EcoEléctrica llevó a cabo un programa de trasplante de corales y hierbas marinas . Este programa se creó para mitigar el impacto ambiental que tendría la construcción del muelle de recibo de gas natural licuado, materia prima de las operaciones de la empresa.
Con innovadoras técnicas, EcoEléctrica trasplantó las yerbas marinas y las colonias de corales que estaban en la trayectoria de los pilotes. A través de más de 12 años de monitoreo biológico llevados a cabo por la compañía, se ha podido documentar el éxito del programa, toda vez que se ha provisto a las agencias regulatorias con valiosa información sobre las especies y hábitats existentes en la Bahía de Guayanilla.
De otra parte, como parte de sus medidas de mitigación, la empresa ha realizado a la fecha 20 censos aéreos de manatíes en conjunto a la Red Caribeña de Varamientos. Durante el último vuelo llevado a cabo en febrero de 2012, se avistaron aproximadamente 70 individuos de esta especie que se encuentra en peligro de extinción. A través de estos censos se documenta la presencia de los mismos y se obtiene información útil que apoya el establecimiento medidas de protección de sus hábitats.
En el 2011, EcoEléctrica estableció un intercambio de recursos y conocimientos con el Departamento de Ciencias Marinas de la Universidad de Puerto Rico en Mayagüez, en el cual la empresa donó a la entidad instrumentos de última tecnología para estudiar los microorganismos fluorescentes de la Bahía de la Parguera. Los estudiantes graduados se encuentran llevando a cabo por primera vez estudios innovadores con el propósito de entender el ecosistema de la bahía y recomendar planes de manejo adecuados para este recurso invaluable para Puerto Rico. A la misma vez, los estudiantes también utilizan el entorno natural donde ubica la planta de EcoEléctrica como un laboratorio vivo donde pueden poner en práctica los conocimientos obtenidos en el salón de clases, colaborando en la realización de los estudios de monitoreo biológico.
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